miércoles, 5 de marzo de 2008

Un momento meditando, un rato de melancolía propia

Hace mucho tiempo creía, que todo era posible, mientras tenía aquella inocencia característica de un infante. Pero al crecer esa inocencia se pierde, uno ya no cree en lo mismo la vida lo golpea, lo maltrata; aunque a veces lo reconforta le da felicidades ajenas y propias, motivos para seguir adelante, uno al ver esto adquiere satisfacción personal.
Hace mucho tiempo yo creía, hace mucho tiempo yo soñaba, hace mucho era feliz; ahora de mi no queda mas que un remedo de lo que fui, sé que no he sufrido ni la diezmilésima parte de lo que sufren otras personas, sé que todo lo que sufro es importante, también sé que este blog que comparto solo con algunas personas que considero especiales no es importante para ellas, tienen una vida. ¿Tener una vida? una pregunta bastante simple si se ponen a pensar, pero de una respuesta complicada, muchos dicen que tener una vida es estar con lo amigos, salir, distraerse, compartir momentos gratos, pero si todo eso es tener una vida, ¿qué es vivir esa vida?, a una conclusión que llegue hace mucho es que vivir y saber vivir son 2 cosas distintas: el primero es lo que hacemos cotidianamente vivir una vida, cumplir horarios, deberes, obligaciones,etc; pero saber que lo que hacemos es vivir a plenitud nadie se puede jactar de hacerlo, tener una vida es fácil, vivirla a plenitud es lo difícil. Se que cuando lean esto dirán que me vino un ataque y lejano de depresión pero no es así, me pus a meditar y comenzaron a fluir estos pensamientos que prefiero escribir y tenerlos de recordatorio a olvidarlos en unos momentos. Tal vez lo que escribo no es más que un grito ahogado y desesperado por ser escuchado, pidiendo ayuda, porque está atrapado, en una cárcel, en este tiempo me he jactado de ser muy selectivo con mis amigos, que los pocos que tengo son los que valen la pena tener, que aquellos con los que voy a fiestas no son tan importantes como los que puedo contar con la mano, es cierto, me autoexhilíe de la sociedad, me aleje, pero no porque sea una naturaleza en mí(bueno en cierta forma lo es) pero es que como hacer amigos, si no eres muy sociable, aunque todos crean lo contrario, ser víctima de bromas, o de penas ajenas por enterarse que tuviste una enfermedad que si no hubiera sido benigna no podría escribir todo esto(sí a los 15 años tuve cáncer). Mi temor es que me traten de enfermo cuando quiero que me traten normal, creanme he visto casos, por eso no digo que tuve cáncer, mi temor preocupar a mi familia por cosas que son de mi vida personal y aunque este por lo suelos devastado no quiero que influya mi actitud en ellos, mi temor envejecer y saber que nunca seré feliz, mi temor más grande perder a aquellos que considero mis amigos.

No hay comentarios:


Grandeza ajena, Respeto propio