Hoy me tocó experimentar una sensación de "libertad" anhelada, luego de 28 años por fin tengo habitación propia. Si es algo insignifcante y que para muchos es normal y hasta sin importancia.
Recuerdo las veces que renegaba con mis hermanos porque sus cosas estaban encima de mi cama y viceversa, o porque pedían que les pasara su zapatos y/o algún calzado que necesitasen, pedirme que les acercase algo de ropa cuando se disponían a salir.
Nunca me molesto algo como eso aunque... a veces ser el hermano menor es un trabajo tedioso, hubo una época en la cual me quede con la habitación para mi solo, claro está no lo sentí mio debido a que las cosas de ellos aún estaban ahí y de alguna manera me gustaba eso. Cuando uno está acostumbrado a vivir y "ser unido" a la fuerza con sus hermanos, la costumbre arraigada a convivir, ahora me queda ganarme una nueva costumbre la de vivir solo en mi cuarto propio.
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