El aburrimiento inunda mi ser, deje de estar absorto en mis pensamientos, en momentos como este es cuando pienso en la soledad absoluta. No vivo ni creo vivir mucho tiempo, quizá sea un deseo oculto, quizá solo estoy exagerado, hasta hace poco revise mi blog, tenia ganas de escribir mas no sabia como empezar, ahora salgo de ese bloqueo escribiendo esto quizá por sentimientos agobiantes, voy a clases de ingles un par de niñas me hablan para copiarse de mi tarea, no se ni porque, no es que la haga excelente pero tampoco la hago horrenda. Me hace recordar la época de colegio esa que muchos desean regresar porque dicen que fue lo mejor pero yo no. Siento culpa pena, tristeza, malestar ajeno dejo que influyan en mi los problemas de algunos, dentro de mi metamorfosis a convertirme en un ermitaño también me volví en una esponja. Intento cambiar mis rutinas, mas se me es imposible, he muerto y aunque lo se, no trato de revivir. El salón muchas veces tiene un ruido estrambótico, ensordecedor, algo caótico pero al llegar la “miss” todos se calla. Visto esto me nace la pregunta ¿Qué demonios hago aquí? si no fuera porque aprendo y a veces me “sobro” (palabra utilizada aquí para dar a entender que se o creo saber demasiado) la verdad es que me falta mucho por aprender, la simpleza de los hechos, las situaciones provocadas son cosas de todos los días, nunca falta el chistoso de la clase en esta ocasión es un niño regordete que calculo tendrá algo de 10 a 12 años quizá exagero, este niño diezma mi paciencia mas no le digo nada por respeto y porque no seria adecuado.
Por mis demás “compañeros” no tengo muchas quejas, perdí el sentido de la historia olvide el punto al que iba y aunque la releí mas de una vez me sigue pareciendo extraña, si en varias historia mías soy confuso en esta debería ganar un premio, no tengo ni mensaje, ni reflexión y muchos menos sentido, pude haberla variado pero no se porque no lo hice quise que mantuviera esa “originalidad”.

